dimarts, 15 de març del 2011

El sueño Europeo


... y después de caminar durante meses, llegó a su preciado destino: la esclavitud moderna. Condenado a vivir el Sueño Europeo el resto de su vida. El final del viaje desembocó en otro viaje. Este, sin embargo, sin retorno. En el camino quedaron las noches en vela. En el camino quedaron los días con sabor a sal, o a gasolina. En el camino quedaron también much@s que no lo lograron. Y en el camino quedó el recuerdo. Para que todo quede en el camino, y del viaje sin fin nadie hable ya nunca jamás. Para así seguir alimentando el hambre Europea con l@s que siguen soñando.